Mi abuelo ha trabajado
siempre en el campo, tiene tierras y esa ha sido su forma de ganarse la vida.
Sus manos si las vieseis son rudas, fuertes y con señas que ha dejado un duro
trabajo.
Mi abuela también ha
agachado el riñón y juntos recorrían los pueblos de la comarca para vender sus
frutas y verduras de buena gana. Tanto es así que en uno de sus viajes no
tuvieron mucho éxito en un pueblo al que se acercaron y mi abuelo, que es un
poco testarudo para estas cosas, no se dio por vencido tan rápido y se fue a
otra localidad cercana a probar suerte. Aparcó la furgoneta en la primera
esquina que vio y allí sin dar tiempo a nada, soltó a grito “pelao”:
"¡señoras, regalo melocotones!". Como podéis imaginar, las mujeres
salieron de sus casas y se acercaron para aprovechar la ocasión que éste les
brindaba. Se fueron todas tan contentas con su "mandil" (delantal
para entendernos) lleno de melocotones.
Mi abuela que pensó que lo
había hecho para no volver a casa con toda la mercancía, le dijo: "Venga
Jesús, vámonos ya!". Y este le espetó: "Calla mujer, ahora hay que
esperar...".
No es porque sea mi abuelo, pero siempre buscaba que sus frutas tuvieran mucho sabor, que las verduras fueran lustrosas y se esmeraba por cuidar todo lo que sembraba, así que...él confiaba en su "producto".
Pasados unos minutos hizo
efecto su hazaña y salieron las mujeres tan contentas de sus casas a por más
melocotones, les había gustado lo que habían probado y querían más. Se
arremolinaron en torno a la furgoneta, cosa que llamó la atención de otras
mujeres y cada vez más se acercaban por allí a comprar sus ricos melocotones.
La jornada finalizó con todo el género vendido.
Mi abuelo no se lo pensó dos veces: en lugar de regresar a casa con todo el género y en espera de que otro día pudiera hacer mejor faena, se arriesgó a perder unos cuantos melocotones y sin embargo, luego lo ganó con la venta de todas las barquillas.
Os
preguntaréis, porqué os estoy contando todo esto. No es que ahora cambie el
registro del blog. Solamente, que cuando estuve de compras el otro día, me
quedé alucinada con los precios de algunas tiendas. Por ejemplo, Zara que tod@s
lo conocéis, se ha "puesto caro" que diríamos corrientemente.
El
caso es que todos estamos afectados de una manera u otra por la crisis que
amenaza España, ¿o acaso Amancio vive en otro mundo? Desde luego que verá la
crisis con otros ojos con semejante bolsillo, pero...seguro que le está
afectando también a su manera. Entonces yo me preguntaba: ¿porque siguen
subiendo ahora los empresarios los precios? en lugar de bajarlos (sin cambiar por
ello la calidad de los productos, por supuesto).
Si Amancio y compañía bajasen los precios, más gente tendrá acceso a sus productos y menos esfuerzo tendrá que hacer en su economía para realizar semejante gasto, por tanto no se lo pensará tanto a la hora de consumir. Con lo cual, beneficio para todos, ¿no?
En
su momento, con la llegada del euro, ninguno tuvo reparos en subirlos, pero
ahora que la cosa anda mal...tampoco quieren bajarlos. Señores, bajen de la
nube, aterricen! que los bolsillos todos estaríamos encantados de tenerlos
llenos. Si sus clientes andan mal económicamente hablando, se van a quitar de
vicios, de gastar tanto, con la consecuencia todo ello de una
espiral que no cesa. Así que, ¿Por qué no dejar de ganar tanto margen con sus
productos? En rebajas ponen las prendas con un descuento algunas de hasta el 70%, con lo cual, imaginar todo lo que ganan el resto del año. ¿Por qué no bajar ese margen de ganancia y permitirnos unos precios más asequibles? ¿Por qué no ser más humildes y ganar menos con sus prendas ahora? Ya
se llevaron lo suyo cuando España era "un paraíso", no quieran
también ahora ganar lo mismo, no? Seamos un poco francos y...vamos a hacer
algo!! más que nada, porque nos está afectando a TO-DOS.
Pd. La historia de mi abuelo es real, me la contó hace poco y enlacé con esta historia de las bolenis, en la que llegué a la conclusión que...se nos está yendo de las manos.
Pd. La historia de mi abuelo es real, me la contó hace poco y enlacé con esta historia de las bolenis, en la que llegué a la conclusión que...se nos está yendo de las manos.
Ojala cogieran ejemplo, lo de Zara es alucinante. Un beso
ResponderEliminarElarmariodebeatriz
Hola preciosa!
ResponderEliminarLo primero de todo, decirte que me ha encantado el post y la historia de tus abuelos... ¡me siento tan identificada con ellos! :__)
Mi madre dice que ahora nosotras estamos viviendo algo similar a lo que vivieron ellos (con sus diferencias claro).
Se acabaron las vacas gordas, al menos para muchos de nosotros. Trabajamos 14 horas de autónomas sin saber muy bien cómo se dará el día de mañana. Preferimos no echar cuentas de a cuánto nos sale la hora, porque seguro, sería desmoralizador. Y la gente nos dice: "aguantar, que al final lo conseguiréis", pero se hace tan duro...
Luego ves a la gente (que la hay también) llenando las terrazas de Madrid, los restaurantes, con sus cochazos y sus casazas y piensas: "¿cómo se lo habrán montado ellos si trabajando como negras logramos llegar a fin de mes a duras penas?" Y siempre llego a la misma conclusión: forrarse de una forma lícita no es posible. Y Amancio tampoco lo hace, aparenete lo que aparente, sino, a son de qué hasta hace un tiempo cuando comprabas en su tienda online resulta que realmente no comprabas en España sino en Irlanda??? pues porque se ahorraba una pasta de impuestos o retenciones o vete tú a saber qué. Pero claro, dejando de cotizar ese dineral en su país, por beneficio propio y nosotras aquí, como memas dejándonos 1 tercio del sueldo en cotizar como autónomas.
En fin, que tienes mucha razón y que ayer mismo hablábamos con unos amigos y nos decían: "¿no creéis que la crisis dejará huella en mucha gente?". Y yo les dije convencida: qué va, el que se forró hace años, está deseando hacerlo. Y a los que siempre pensamos que las cosas se podían hacer de otra manera, no nos hacía falta una crisis para darnos cuenta de ello. Justos por pecadores y tarde o temprano, la historia se repetirá.
Perdona mi mega post. Pero es que hoy tenía "el día".
Un abrazo linda,
Ana B.
lo de Zara es increible pero vamos sigue siendo el top de ventas con lo que a el supongo que plin
ResponderEliminarbesitoooos
Hola bella, la gente que como tus abuelos han trabajado para elos, sabemos muy bien lo que es perder para ganar. Yo al igual que las preciosas Bolenis, trabajo mucho cada día sin saber si habrá sueldo a fin de mes, porque a veces no lo hay. Trabajo con márgenes pequeños que además debo ajustar porque sé que todo está mal, pero sabes que?
ResponderEliminarQue a veces aún hay quien me intenta regatear 2€...
Que bonita historia, me ha gustado mucho leerla.
ResponderEliminarBesos
http://rinconcreacion.blogspot.com
que buen post y que bonito!
ResponderEliminarwww.lessismoreblog.com
Una historia preciosa y qué grandes los abuelos!! Tenían que ser eternos :)
ResponderEliminarUn besito guapa y gracias por comentar!
La moda muere joven
Es la primera vez k t leo y m ha encantado este post, yo rn zara solo compro en rebajas el resto del año no m lo puedo permitir, , besotes
ResponderEliminarMuy inteligente tu abuelo, para ganar, antes hay que perder!!!
ResponderEliminarTienes muchísima razón con Zara y etc....
Besitos:
Esther (Estée)
http://estherelipeferrer.blogspot.com.es/
Ostras Leti, que razón tienes y que buena lección la de tu abuelo. Es que no tienen consideración con los que lo estamos pasando mal, leñe. Además creo que a la larga esto les perjudicará porqué la gente se fija en esos detalles.
ResponderEliminarUn besazo y muy buena reflexión :)
www.momentazostaqui.com